Una de las plagas que más miedo da a los hortelanos y hortelanas es la Tuta Absoluta. A estas alturas, o bien has sido previsor/a y has tomado medidas para evitar que se apodere de tus tomates, o estás en plena lucha por intentar salvar alguno.

Si no tiene claro si lo que está afectando a los tomates de su huerto es la Tuta, debe saber que los síntomas son muy claros: picadas en los tomates cuando todavía son verdes, manchas en las hojas, frenada del crecimiento de las plantas y la podredumbre del tomate.

Llegados a este punto, ¿qué podemos hacer?

La captura de las mariposas con la trampa de agua o cromática con la feromona sexual, ayudará a detectar el alcance de la plaga y reducir la población con la caza de los machos. A partir de aquí, dependiendo de si disponemos de carné de aplicador fitosanitario o no, se podrá realizar un tipo de tratamiento u otro.

Con carné: se aconseja la aplicación de Bacillus Thuringiensis, una bacteria que produce toxinas que son letales para ciertas larvas de insectos (como las orugas) pero son inofensivas para otros organismos. El atardecer es un momento óptimo para la aplicación, ya que es menos probable que el producto se degrade rápidamente por la luz solar directa y puede ser más efectivo durante la noche, cuando las orugas están más activas.

Sin carné: Una alternativa efectiva es aplicar tierra de diatomeas (un producto natural hecho de restos fosilizados de diatomeas, un tipo de alga) sobre los tomates. Esta aplicación se puede hacer sacudiendo (tirando polvo de forma uniforme) o pulverizando (aplicando en forma de solución líquida con un spray). Una alternativa natural y no tóxica a los pesticidas químicos, útil para controlar plagas en plantas de tomate, y no requiere tener un carné especial para su aplicación.

Para cualquier tipo de tratamiento puede dirigirse a nuestros técnicos o comprarlos a través de nuestra tienda online. Los productos que requieren carné de aplicador fitosanitario se tendrán que comprar en tienda.