Las balsas de riego, una buena herramienta para ayudar a mantener la producción agrícola
Las balsas son infraestructuras que almacenan agua procedente de diversas fuentes como precipitaciones o pozos y que se utilizan principalmente para el riego.
El cambio climático que estamos sufriendo provoca irregularidades en los patrones de lluvia que cada vez más dificultan el abastecimiento de agua y que castigan de forma severa actividades como la agricultura. Éste es uno de los motivos por los que las balsas de riego se han convertido en una buena herramienta en la gestión del agua en este sector.
Estos tipos de balsas son infraestructuras que almacenan agua procedente de diversas fuentes como precipitaciones o pozos y que se utilizan principalmente para el riego. Los episodios de lluvia intensa y abundantes en un momento determinado, seguidos de períodos más secos o con precipitaciones muy reducidas hacen que se conviertan en un reservorio de agua que ayuda a mantener la producción agrícola. Las balsas permiten la gestión de los recursos hídricos de manera eficaz, liberándo el agua en épocas de riego y almacenándola cuando existe exceso.
En Saiga, estamos especializados en la impermeabilización de balsas. Nuestros técnicos trabajan con materiales con gran durabilidad y con características idóneas para esta aplicación como son las láminas de PVC (Policloruro de vinilo) o las láminas de polietileno. Ambos materiales se caracterizan por la capacidad de mantener el agua almacenada previniendo filtraciones a la vez que disponen de una gran resistencia a los factores ambientales y productos químicos. Por su parte, su flexibilidad permite adaptarse a superficies irregulares y cubrir grandes superficies sin tener que recurrir a juntas y costuras complejas que podrían provocar filtraciones.
Aunque ambos materiales son adecuados para la impermeabilización de balsas de acumulación de agua, la selección del material dependerá de factores como las dimensiones de la balsa, el presupuesto y los requisitos específicos de la aplicación. Es importante consultar con nuestros profesionales cuál es el material más adecuado en cada caso.
Si está pensando en construir una balsa, antes tendrá que hacer un estudio de la zona donde se quiere instalar, de las características del suelo y del tamaño porque son factores que afectarán al diseño de la balsa. La selección del lugar, teniendo en cuenta la zona de drenaje y la capacidad de almacenamiento, también tendrán que valorarse. Por último, hay que tener en cuenta la salida del agua que será clave para prevenir desbordamientos.