Tradicionalmente, hemos hablado del silicio en relación con la resistencia mecánica que aporta ante los ataques de hongos y pulgones, pero no tanto de su efecto del control de la evapotranspiración. La evapotranspiración de las plantas es el proceso combinado de pérdida de agua que ocurre a través de dos vías: evaporación del agua del suelo y transpiración del agua de las plantas.

En este sentido, se ha observado que el silicio se considera un elemento beneficioso, ya que puede ayudar a reducir la tasa de evapotranspiración en diversas especies vegetales. Gracias a un primer efecto estimulante, que posteriormente provoca un endurecimiento de brotes, hojas y frutos, ayuda a disminuir la pérdida de agua de la planta haciéndola más resistente al estrés hídrico y esto hace que se pueda trabajar con menor consumo de agua. Asimismo, las plantas tratadas con silicio pueden presentar una reducción de la temperatura en las hojas, especialmente en situaciones de calor extremo.

El uso del silicio en la agronomía es, pues, una herramienta con mucho potencial, especialmente en episodios de sequía y de irregularidad de las precipitaciones.

Labin Fertisil es un producto basado en el silicio, técnicamente avanzado y de aplicación para fertirrigación, que protege y refuerza las plantas. Introduce un concepto de protección de cultivos muy innovador y totalmente natural, basado en la combinación de dos factores: mejora el estado nutricional y el endurecimiento de la epidermis. Con Labin Fertisil obtenemos la misma producción con un 20% menos agua.